¡Convertimos los coches de juguete en pinceles!
Pintaremos sobre una cartulina grande de una forma muy divertida: ¡usando coches pequeños como si fueran pinceles! Solo necesitamos pintura, una hoja grande y coches de juguete con ruedas que se puedan ensuciar.
Ponemos un poco de pintura en un platito, pasamos las ruedas del coche por encima y… ¡a conducir sobre el papel! También podemos verter un poco de pintura sobre la cartulina y… ¡a conducir!
A medida que el coche avanza, las ruedas dejan su rastro de color. Podemos hacer líneas rectas, trazar curvas alocadas, crear circuitos o chocar diferentes colores para ver qué pasa.
Es una actividad genial para hacer en el suelo, experimentar con colores y texturas, y ser creativos y creativas.